Después de los acontecimientos que están viviendo en las últimas semanas las bolsas mundiales y el mundo de la inversión con la crisis del COVID-19, creemos que puede ser interesante hablar sobre la volatilidad en los mercados. Y sobre cómo, mediante 10 consejos, podemos entenderla y que ello nos ayude a la hora de enfrentarnos a los mercados como inversores particulares.
Lo primero de todo haremos una pequeña introducción de lo que es la volatilidad por si eres de los que se están introduciendo en el mundo de la inversión y todavía no estás familiarizado con algunos conceptos más básicos.
La volatilidad no es más que el grado o nivel de oscilaciones dentro de un determinado plazo de tiempo que registran los precios de los activos financieros; y para calcularla se mide la variación que tiene un activo respecto a su media en un periodo determinado.
Una mayor volatilidad nos dirá que ese activo financiero tiene grandes oscilaciones respecto a su media y viceversa, una menor volatilidad nos indica menores oscilaciones respecto a su media y por lo tanto un grado de dispersión mucho menor.
Debemos de recordar que, si tenemos un buen plan establecido y bien estructurado, no tendría que suponer, para nuestra inversión, un mayor problema los periodos volátiles. Aún así, no está de más tener claros estos diez consejos:
- Tenemos que entender que la volatilidad estará presente en una inversión a largo plazo
- Si mantenemos nuestra inversión a largo plazo, la volatilidad en bolsa suele recompensar
- Las correcciones de las bolsas pueden generar oportunidades de compra para el inversor
- En periodos volátiles debemos de evitar salir y entrar constantemente en las inversiones
- Si invertimos regularmente obviando los periodos volátiles a largo plazo los beneficios acaban acumulándose
- Si diversificamos, las inversiones suelen tener una volatilidad menor
- La volatilidad de la cartera la podemos ver reducida si invertimos en empresas o activos de calidad que paguen dividendos de manera periódica
- Reinvertir los dividendos generan aumentos en las rentabilidades totales de las carteras
- No hay que dejarse llevar por el mercado
- La inversión activa puede ser una estrategia muy exitosa en tiempos volátiles
En definitiva, la volatilidad puede asustar, pero si la conocemos bien puede acabar siendo nuestra mejor aliada.
Esperamos que estos pequeños consejos os puedan ayudar a tener unas pautas sobre cómo reaccionar en tiempos volátiles y, sobre todo, a mantener la calma en tiempos de nerviosismos.
Lo que está claro es que si estamos bien perfilados y metidos en el nivel de riesgo que somos capaces de aguantar, la volatilidad generada en periodos de inestabilidad económica no debería preocuparnos en exceso.