Diario

¿Por qué es tan necesario el test de idoneidad?

Test de idoneidad

Cuando un inversor entra en nuestra página web con intención de registrarse, va a tener que responder a un test de idoneidad. Se trata de un conjunto de preguntas donde se evaluará la idoneidad de las operaciones financieras del cliente y que no tardará más de 2 minutos en contestar. Es obligatorio para aquellos clientes a los que se les vaya a prestar servicios de asesoramiento financiero o de gestión de carteras en cumplimiento de la normativa MiFID.

Según la CNMV, el test de idoneidad se define como un “conjunto de preguntas que las entidades financieras realizarán a sus clientes para obtener información sobre sus conocimientos y experiencia previos, así como sobre sus objetivos de inversión y su situación financiera. Estos datos permitirán a la entidad recomendar las inversiones más adecuadas para el inversor”. La comisión advierte además de que aquellos servicios de asesoramiento financiero o de gestión de carteras no podrán darse hasta que la información solicitada no haya sido proporcionada.

Para el asesoramiento en fondos de inversión que ofrece Feelcapital, este test es una pieza clave para conocer a nuestros clientes, a diferencia de ciertas entidades financieras donde se ve como un trámite burocrático. Por ejemplo, ya advertimos de que los fondos de pensiones se venden sin realizar el perfil de riesgo a los partícipes. A nosotros nos permite crear la “Línea Vital Financiera”, donde el cliente podrá ver su horizonte temporal de inversión, su rentabilidad esperada y su aversión al riesgo.

El test, entre otras, se compone de preguntas donde se valoran los conocimientos y experiencia del inversor, el nivel y fuente de ingresos periódicos, sus activos (líquidos, inmuebles u otras inversiones) o sus compromisos financieros. El inversor también deberá de informar sobre otros conceptos, como la finalidad de la inversión o la pérdida máxima que estaría dispuesto a asumir.

En conclusión, la realización del test de idoneidad tiene una doble finalidad. En primer lugar, que el cliente conozca cuáles son los riesgos que puede asumir cuando decida invertir. Muchos de ellos piensan que pueden asumir un riesgo mayor del que en realidad deben. Y en segundo lugar, para proporcionar información a aquellas entidades que quieran ofrecer un asesoramiento eficiente que se ajuste a las finanzas personales de los inversores.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.