Finanzas personales
Con la llegada del sol y el calor, los meses de verano se convierten en sinónimo de desconexión para gran parte de los trabajadores. Es la época del año ideal para relajarse y tomarse un merecido descanso vacacional.
Sin embargo, esta época también está llena de grandes oportunidades laborales y de proyectos emprendedores para aquellos que aprovechan, precisamente, el momento en que los demás se relajan para potenciar su propia suerte. El verano es, entonces, un gran momento para muchos emprendedores que dan rienda suelta a su creatividad para dar vida a sus ideas y ponerlas a punto en septiembre, iniciando un nuevo ciclo.
Para sacar provecho de verdad, lo primero que hay que tener en cuenta es que hay que mentalizarse en conseguir las metas que nos proponemos (aunque sea verano). A muchos les pasa que se les ocurren grandes ideas de negocios a nivel teórico y, sin embargo, frustran ellos mismos las posibilidades de éxito con negatividad y prejuicios. Si a esto se le suma además el buen tiempo y las ganas de la gente de aprovechar el momento para salir y hacer las cosas que no pudieron hacer antes durante los meses de más estrés, la cosa se complica.
Si lo que se pretende es llevar una idea a la práctica durante el mismo verano, hay que tener en cuenta algunas cosas que pueden favorecer el impulso de ésta.
Lo primero es conocer cuáles son los sectores clave en los que hay mayor volumen de trabajo y posibilidades de éxito. Estos son la hoterería, transporte, estética y moda y los servicios. Según la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), España recibió el año pasado 65 millones de turistas internacionales y el turismo doméstico ha retomado la senda de la recuperación. Se estima que la tendencia para este verano sea positiva y, en el mercado nacional, los hoteles registren un aumento de las reservas del 10% y las agencias de viajes incluso cifras superiores. Sin duda, unas estimaciones muy optimistas que pueden convertir tu idea en un gran éxito.
Otra buena opción que suele funcionar es la de comenzar tu propia franquicia. Es un sistema muy útil si lo que se quiere, al fin y al cabo, es emprender, con la ventaja de que la creatividad y los riesgos de testeo ya están hechos. Lo que no hay que dejar de hacer es informarse y conocer cuáles son las franquicias más recomendadas para ésta época. En verano los establecimientos más exitosos son los de gastronomía, los centros de belleza y moda, y en los últimos años se mantiene en auge las heladerías.
Entre las ventajas que tienen los negocios veraniegos se encuentran la de la gran disponibilidad de talento que se ofrece para ser contratado. Es el momento en el que muchos jóvenes repletos de ganas y motivación tras el curso de estudios, dedican su tiempo a buscar un trabajo (si puede ser que les guste) para dedicarle todas sus energías y demostrar sus aptitudes a la empresa oportuna (o simplemente para ganarse unos eurillos para sus gastos en vacaciones). Al final, esto significará un valor extra para la empresa emprendedora.
Por otro lado, si la intención del desarrollo de negocio está pensada para septiembre, cuando todos volvemos a nuestra rutina con los hábitos particulares de cada uno, entonces el verano se convierte en la primera etapa de la creación de una nueva empresa. En ella se aprovechará el buen tiempo y la mayor cantidad de horas de luz para trabajar con la sensación de tener más tiempo para todo. Esto consecuentemente supondrá un proceso de trabajo de investigación y planificación, con más relax y productividad para disfrutar el nacimiento de una nueva marca.
Al final, el verano es una época del año maravillosa que instantáneamente nos trae a la cabeza imágenes de piscinas, barbacoas, playas y amigos. Pero es que además, puede ser el momento más productivo del año.